Surcando los cielos y llevada por el viento ha viajado miles y miles de kilómetros hasta las selvas de la amazonía en dónde la cometa ha empezado a descender.
Un joven de la tribu yanomami se apresura al encuentro con este extraño objeto que ha venido de los cielos. Sabe que algo tan extraño no puede ser otra cosa más que un mensaje sagrado de la madre tierra. Un mensaje para él pues lo ha estado esperando y al parecer nadie más lo ha notado.
Cerca de su alcance ha decidido saltar para tomarlo y justo en ese instante ha salido electrocutado.
Sin saber cuanto tiempo había pasado despierta el joven con una extraña vitalidad en su interior y al preguntarse por la cometa ha encontrado un pedazo de esta sembrada como una flor. Todo estaba ya muy claro. Proteger a la madre tierra es ahora su misión.
- Ciertamente hay señales para todo aquel que cree.-
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